A 4 años de la fundación del SIDUNSJ, Esteban Vergalito, Secretario General del gremio de docentes universitarios de San Juan reflexionó sobre el contexto de surgimiento del sindicato, las bases sobre las que se fundó, sus objetivos y las características de su política gremial que lo diferencian de la tradicional conducción sindical. Además, Vergalito habló sobre los avances que el gremio logró en cada área de trabajo, sobre la importancia de la Carrera Docente en el contexto universitario actual y el impacto de esa discusión sobre la regulación de la planta laboral docente en la UNSJ.

A continuación la entrevista:

 ¿Con qué contexto gremial docente se encontró el SIDUNSJ al momento de su fundación?

Cuando a fines de septiembre de 2013 fundamos el Sindicato de Trabajadores Docentes de la Universidad Nacional de San Juan, lo hicimos desde un claro diagnóstico de la problemática gremial docente en nuestro medio y desde una decidida toma de posición frente a ella. En líneas generales, nuestro diagnóstico revelaba que el modelo sindical docente universitario hasta entonces conocido a nivel local había ingresado en una etapa de agotamiento en su potencialidad para representar las demandas genuinas de los docentes de la UNSJ y que su formato de intervención gremial no dialogaba adecuadamente con los intensos procesos político-culturales de transformación en curso en el país y en la institución universitaria.

La convicción que nos animaba a construir una alternativa sindical se derivaba directamente de esta observación general. Dada la situación existente, era necesario crear no solamente una nueva institución gremial docente universitaria: por sobre todas las cosas, era indispensable instituir un nuevo sujeto colectivo docente que estuviera a la altura de los desafíos que la actual etapa histórica le planteaba a la Universidad Pública. En la Federación Nacional de Docentes Universitarios, la CONADU, encontramos un inmejorable marco de referencia nacional para la política gremial que nos sentíamos llamados a desplegar en San Juan, orientada por el anhelo de construir una Universidad Popular gratuita, laica, inclusiva, democrática, emancipatoria y en constante proceso de fortalecimiento de su potencialidad política y académica.

¿Qué distingue al SIDUNSJ de la política gremial preexistente y qué lo caracteriza?

Afincado en la valiosa experiencia previa de organización colectiva del SUTEN en los Institutos Preuniversitarios de la UNSJ, el SiDUNSJ fue mostrando desde sus comienzos la marca distintiva de este nuevo modelo gremial: un sindicato comprometido no solo con la realidad de los docentes, sino también con la real inclusión educativa de nuestros estudiantes, con la transformación curricular, normativa y cultural de la institución, y con el destino general de nuestro pueblo. Suscribiendo plenamente una de las consignas principales de nuestra Federación, que afirma que “la Universidad que queremos es inseparable del país que anhelamos”, el SiDUNSJ avanzó firmemente en los últimos años en la construcción de una propuesta gremial sólida, amplia y coherente, con arraigo local y con proyección nacional, siempre desde la perspectiva del campo popular y de la Patria Grande.

Por esta vía, en poco tiempo logramos desarrollar una política gremial integral, consistente y constructiva, que no se enraíza en la enemistad entre “lo laboral” y “lo académico” sino, muy por el contrario, en el reconocimiento de la especificidad del trabajo docente en el ámbito universitario, para articular desde allí políticas progresivas en un cuádruple nivel contextual, laboral, académico e institucional. Es así que la práctica gremial tradicional de sesgo “sectorial”, que entiende al docente desde una visión corporativa y desgajada de su propio ámbito de inserción, comenzó a perder terreno ante la emergencia de una praxis sindical con un fuerte sentido de compromiso con la UNSJ y que concibe a las/os docentes como parte de una amplia comunidad de derechos fundada en el derecho universal a la educación, en la que conviven diversos actores (estudiantes, trabajadoras/es, graduados, pueblo en general). Esta original impronta sindical, caracterizada por una profunda convicción democrática y democratizadora, y por una intervención en el espacio público constantemente ensamblada con otros colectivos de derechos, se materializó en modalidades de lucha inéditas en nuestro medio, signadas por la intervención pública en el territorio universitario y ciudadano. En este sentido, las campañas de sensibilización, clases abiertas, asambleas, consultas y movilizaciones que hemos impulsado desde el SiDUNSJ lograron visibilizar situaciones negadas durante muchos años en nuestra Universidad y en la sociedad, instalar nuevas demandas en el ámbito universitario local e incorporar la mirada gremial a la agenda académica e institucional de la UNSJ.

¿Qué resultados obtuvo el SIDUNSJ en general y en cada área de trabajo en particular?

Pese a su juventud, durante el período 2013-2015, el SiDUNSJ obtuvo el reconocimiento como entidad gremial por el Ministerio de Trabajo de la Nación, realizó su primera elección y puso en funciones a su primera Comisión Directiva. Creo que éste es el primer logro fundamental: la aparición del SiDUNSJ hizo concreta la libertad sindical al ofrecer una nueva opción de representación y afiliación para los más de tres mil docentes de la UNSJ que, gracias a la creación de nuestro Sindicato, hoy tienen la posibilidad de ser parte de un nuevo modelo gremial que los contiene y expresa.

Este proceso fundacional sentó las bases para la etapa subsiguiente de institucionalización del SiDUNSJ, iniciada a fines de 2015 con la asunción de la primera Comisión Directiva. Este segundo momento, todavía en curso, se ha caracterizado por el crecimiento exponencial del Sindicato a nivel cualitativo y cuantitativo.

En el orden institucional interno, la gestión de la primera Comisión Directiva se ha destacado por el manejo responsable y democrático de la cosa pública, reflejado en la fluidez de la información a todas/os las/os docentes a través de diversos canales informativos (correo electrónico, redes sociales, página web, medios masivos de prensa, etc.), la transparencia de los actos de gobierno y administrativos, y la permanente convocatoria a la participación de las/os afiliadas/os en la vida del Sindicato. Este estilo de conducción sindical nos pone hoy a las puertas de la conformación del Cuerpo de Delegados, que inaugurará una nueva fase de expansión y consolidación de nuestra propuesta gremial, ampliando y fortaleciendo la presencia del SiDUNSJ en toda la UNSJ.

En el área de Formación, la pertenencia del SiDUNSJ a la CONADU –la Federación que por su peso específico define la firma de los acuerdos paritarios nacionales– garantiza la continuidad de los Programas de Capacitación Gratuita en la UNSJ, año tras año. En este marco, nuestro Sindicato instauró en el ámbito local una lógica de aprovechamiento creciente de los fondos de capacitación conquistados por la CONADU, a partir de la definición de una agenda de prioridades temáticas en “áreas de vacancia” para la selección de propuestas de cursos. Esta redefinición permitió diversificar la oferta, pasando de los cursos de capacitación y perfeccionamiento laboral a los seminarios de posgrado y a los trayectos formativos. Así, pudimos diseñar e implementar un Trayecto de Capacitación para Preceptores que no tenía antecedentes en nuestra Universidad, efectuando una contribución muy importante tanto a las/os compañeras/os preceptoras/es como a la propia institución (actualmente, ese primer Trayecto está finalizando). Hoy, profundizando esta línea de trabajo, arribamos a la propuesta de varios trayectos más en distintas temáticas (Derecho, Comunicación, etc.) y de una Especialización en Extensión Universitaria sin precedentes en el país, diseñada enteramente por afiliadas/os del SiDUNSJ. Esta nueva carrera de posgrado podría ser íntegramente gratuita en su primera cohorte gracias a los fondos de capacitación logrados por la CONADU en 2015 y 2017 en el ámbito paritario nacional (para lo cual es necesario un Acta Acuerdo local suscripta con la UNSJ) y constituiría un sustantivo aporte para la jerarquización de la extensión universitaria en nuestra Universidad, en el marco de una política académica de restablecimiento del equilibrio de las diversas funciones del trabajo docente universitario y de profundización del vínculo entre Universidad Pública y Territorio.

En el campo de la política gremial de Derechos Humanos y Género, el inclaudicable compromiso del SiDUNSJ con los derechos de los distintos sectores vulnerables y del pueblo en general se ha canalizado en su participación sostenida en la Coordinadora de DDHH de la Provincia de San Juan, en numerosos actos públicos en defensa de los derechos a la Educación y a la Comunicación, en manifestaciones por Memoria, Verdad y Justicia, en movilizaciones contra la violencia institucional y de género, en tareas de formación en materia de Educación Sexual Integral y en el acompañamiento a víctimas y testigos de delitos de lesa humanidad. En el último año y medio, esta amplia e intensa intervención en la escena pública se ha dado en el contexto de una constante presencia del SiDUNSJ en las movilizaciones de lxs trabajadorxs y del pueblo en general contra las políticas neoliberales de tarifazos, ajustes, desempleo, precarización y explotación laboral. En este marco, la CTA de los Trabajadores ha constituido una herramienta fundamental para la vinculación de nuestro gremio con otros sindicatos y movimientos sociales locales y nacionales.

En el plano de la Paritaria Local, la participación del SiDUNSJ ha sido decisiva tanto para replantear las reglas de las relaciones paritarias, bregando por la plena independencia de los dos sectores que la componen (parte trabajadora y parte empleadora), como para alcanzar avances trascendentes en la situación laboral de los docentes, en la calidad educativa y en la vida de la propia institución universitaria. Hoy nos encontramos en vías de aprobación de una normativa de Carrera Docente largamente postergada en la UNSJ, en cuyo proceso de gestación los trabajadores docentes hemos sido protagonistas gracias al compromiso y trabajo sostenido del SiDUNSJ, tanto en la Comisión creada a tal efecto en el año 2015 en el ámbito del Consejo Superior como en los posteriores debates en asambleas de docentes en las Facultades y en la Comisión específica de la Paritaria Local. Este marco regulativo es fundamental para sentar las bases de un nuevo modelo de Universidad en el que el respeto irrestricto de los derechos de todos los trabajadores docentes, consagrados por nuestro Convenio Colectivo de Trabajo, sea el suelo sobre el que se asiente la mejora continua de la enseñanza, la investigación, la extensión y la creación. Solamente desde ese acuerdo político-institucional de doble faz, a la vez gremial y académico, podrán compatibilizarse los dos aspectos básicos de nuestro trabajo docente y garantizarse el efectivo ejercicio del derecho a una educación de calidad creciente por parte de las actuales y futuras generaciones de estudiantes de la UNSJ.

¿Qué implica, en el contexto actual de la UNSJ, tener Carrera Docente?

Al igual que el Convenio Colectivo que lo encuadra jurídicamente, el régimen de Carrera Docente sintetiza las dimensiones contextual, laboral, académica e institucional del trabajo docente. Contextual, porque ratifica los principios de acceso igualitario, publicidad e idoneidad que rigen en una Universidad cuyo carácter Público es constitutivo. Laboral, en la medida en que restituye plenamente la condición de trabajador/a a las/os docentes, con reconocimiento de sus derechos en cuanto tales (condición muchas veces encubierta por un paradigma sacrificial del trabajo docente). Académica, porque destaca la especificidad de la labor docente en el ámbito de la Universidad, definida por la producción de saber/es. Institucional, dado que nuestro trabajo docente específico no puede darse sino en ese espacio público-democrático de pertenencia, acción y proyección que denominamos “Universidad”. Todos estos aspectos están íntimamente ligados en el proyecto de Carrera Docente de la UNSJ, que tiene por objetivo principal garantizar los derechos laborales conquistados en el ámbito paritario nacional a través del CCT (estabilidad en el cargo, proyección académica, nuevas licencias laborales, etc.) y los derechos políticos plenos para todos los docentes de nuestra Universidad (eliminando progresivamente la distinción entre una ciudadanía universitaria “de primera” y otra “de segunda”).

Pero además de esto, la futura puesta en marcha de la Carrera Docente debería conllevar una transformación profunda de la institución, tendiente a la promoción de una activa y permanente política de concursos públicos que abran para todos los docentes un horizonte de cobertura de vacancias y de proyección académica en un marco de reglas de juego claras y constantes, minimizando la posibilidad de decisiones arbitrarias por parte de las autoridades universitarias. Ésta debería ser la consecuencia de un verdadero compromiso de todos los actores de la institución con la Carrera Docente.  De concretarse, este proceso debería implicar la progresiva creación de una nueva cultura laboral-académica e institucional, caracterizada por un esfuerzo colectivo constante orientado a la construcción de una mejor Universidad.

¿Cómo se vincula la discusión paritaria local en torno a la Carrera Docente con el proceso de regularización de las plantas laborales docentes de la UNSJ?

Una vez aprobada en el seno de la Comisión Negociadora de Nivel Particular, la Carrera Docente creará un nuevo encuadre normativo desde el que será posible y pertinente acordar, también en paritarias, un mecanismo transicional de regularización de los más de mil docentes que revistan en condición de interinos en nuestra Universidad, contenidos en el Artículo Nº 73 de nuestro Convenio Colectivo de Trabajo. Esta segunda norma permitirá que los docentes que reúnan los requisitos puedan aspirar de manera voluntaria a alcanzar la estabilidad laboral en su cargo dentro del régimen de Carrera Docente, a través de una modalidad de evaluación especial de sus aptitudes para ocuparlo como “regular” u “ordinario”. Para ello, será fundamental continuar profundizando el camino del diálogo y de la búsqueda de acuerdos razonables que el SiDUNSJ viene impulsando con los distintos actores de la comunidad universitaria involucrados en este proceso institucional de toma de decisiones, a fin de asegurar la producción conjunta de la nueva normativa por vía del consenso, único medio válido de legitimación en una institución democrática. Una vez arribados a este punto, con las Actas Acuerdo emanadas de la Paritaria Local, se podrán iniciar tres procedimientos institucionales secuenciados: primeramente, la creación del instrumento legal de aplicación del Acta Acuerdo en el ámbito administrativo (Resolución u Ordenanza del Consejo Superior); en segundo lugar, el proceso institucional de presentación de solicitudes de ingreso a la Carrera Docente vía aplicación del Art. Nº 73 del Convenio Colectivo de Trabajo por parte de las/os docentes interesadas/os; y por último, el proceso de evaluación especial previsto por esta nueva normativa para la regularización de las/os docentes en el marco de la Carrera Docente, sólo para quienes lo hayan solicitado.

¿Qué reflexión harías sobre lo expuesto?

El breve pero intenso camino recorrido por el SiDUNSJ demuestra que la construcción democrática y participativa es posible, y que sus resultados son cualitativamente distintos de los que se alcanzan bajo otros modelos de construcción de la organización sindical. La política gremial docente en el ámbito universitario no debe ponderarse únicamente teniendo en cuenta sus reivindicaciones. Es necesario evaluarla, ante todo, a partir de su coherencia ético-político sindical, de sus conquistas colectivas concretas para el sector que representa, de su capacidad de acción conjunta con otros actores colectivos y de su contribución en la creación de una cultura universitaria cada vez más democrática, emancipada y comprometida con las necesidades concretas del conjunto de nuestro pueblo.